
Poeta y jardinera, Angélica Olcese nos abrió las puertas de casa en Colonia, un chacra de siete hectáreas, resultado de treinta años de trabajo.
Los cursos y talleres de la Sociedad Argentina de Horticultura le permitieron a la dueña de casa diseñar todos sus espacios verdes. La chacra, originalmente, tenía un monte de olivos, una palmera, unas higueras y un naranjal en mal estado. De a poco, Angélica fue animándose con canteros que fue ampliando y replicando en paralelo. Uno de sus máximos orgullos es el gran invernadero con una importante colección de cactus y suculentas.
El camino de entrada en la chacra fue diseñado por la paisajista Joyce Bell hace casi 15 años. El proyecto incluyó la ampliación del parque en unas cuatro hectáreas, y fue llevado a cabo por la propia dueña. El jardín de agapantos, casi punto focal entre tantos potreros, fue todo un desafío.
desde Poesía cotidiana: un jardín inspirador | Revista Jardín.
(nota con fotogalería)


Debe estar conectado para enviar un comentario.