
Entrevista: Almuerzo con … J. María Ezquiaga
José María Ezquiaga (Madrid, 1957) eligió el restaurante por sus raíces guipuzcoanas. Le recuerda a su padre, empleado en una papelera de Tolosa, y cuánto le hubiera gustado saber que el hijo, que no se arredra fácilmente y pide chuletón poco hecho, ha vuelto de alguna forma a los orígenes. Su estudio ha sido el único español de cuatro seleccionados (incluida Zada Hadid) para el gran proyecto de regeneración urbana de la bahía de Pasajes (Guipúzcoa). Tiene otro motivo de celebración: ha ganado, junto a Richard Rogers (Terminal T4 de Barajas) y Luis Vidal, el primer premio para urbanizar La Marina, en San Sebastián de los Reyes (Madrid).
Este arquitecto, que pronto se decantó por el urbanismo, es responsable de los planes territoriales y generales de media España: Menorca, Lanzarote, Gernika (Vizcaya), León, Ávila, Córdoba, Burgos, Logroño y Parla (Madrid), entre otros. Además de la prolongación de la Castellana, en Madrid. De esta ciudad defiende que su gracia no está en ser castiza, sino en su carácter global. «Reúne las condiciones ideales para afrontar el futuro. Una identidad más metropolitana que cultural y su facilidad para incorporar a todo el mundo. La ciudad del futuro tiene que ser global y, a la vez, atenta a las raíces. Como París o Londres, de las que nadie discute su papel planetario, pero a la vez amigable».
desde «Una ciudad segregada en barrios es explosiva» · ELPAÍS.com.

