Sueño de la ciudad inteligente – elcultural.es


La Smart City deja los laboratorios y se convierte en un nuevo frente para las tecnologías de la información.

José Luis DE VICENTE

Centro de operaciones de Río de Janeiro de IBM - www.elcultural.es
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El siglo XXI está llamado a ser el siglo de las ciudades por lo que las administraciones públicas deben plantearse nuevos modelos de gestión. Para ello, la aplicación de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) propone un nuevo modelo de ciudad inteligente, la Smart City.

En la localidad catalana de Sant Cugat, al norte de la capital, hay una calle distinta a todas las demás. En César Martinell, situada en una de las zonas más acomodadas de Barcelona, distintas start ups con el apoyo del Ayuntamiento local están llevando a cabo un experimento que la convierte en un prototipo de cómo gestionaremos el espacio urbano en el futuro. Cesar Martinell es la primera “calle inteligente” de España.

Aparcar el coche en la calle inteligente de Sant Cugat, por ejemplo, es algo más sencillo de lo habitual: unos paneles de información nos comunican si existen plazas disponibles en ese momento y nos dirigen hacia los espacios libres, gracias a sensores en el pavimento que detectan la presencia de otros coches aparcados. Los contenedores de residuos pueden medir su grado de ocupación, e informar al servicio de limpieza de cuando se encuentran llenos. La zona verde en la calle también cuenta con sensores, para medir la humedad y activar los aspersores de riego sólo cuando sea necesario. Incluso la iluminación de las farolas se gradúa automáticamente en función de la gente que se encuentre en la calle en ese momento, ahorrando luz cuando no es necesaria.

Si grandes empresas del sector TIC como IBM, Siemens o Cisco, se salen con la suya, el paradigma sobre el que imaginaremos nuestras ciudades en el siglo XXI girará alrededor de estas instantáneas de una ciudad armoniosamente eficiente, de tecnologías precisas que mejoran la vida del ciudadano. La oportunidad de la Smart City surge a medida que los sistemas que rigen la ciudad se informatizan y generan constantemente información. En los últimos cinco años, el Laboratorio de la Ciudad Sensible (SENSEable City Lab) del MIT se ha hecho conocido internacionalmente por sus retratos de la actividad colectiva en la ciudad a partir del análisis de los flujos de datos que generan sus redes. En sus proyectos, cartografías digitales y visualizaciones muestran cómo un diluvio repentino en Singapur se refleja en cómo se multiplican por la ciudad las peticiones de taxis.

El sueño y la promesa de la Smart City ha dejado los laboratorios para convertirse en un nuevo frente para las tecnologías de la información, que pone sus ojos ahora en la reinvención del medio urbano. Su punto de partida es que nuestras ciudades se gestionan por mecanismos obsoletos incapaces de resolver sus problemas, necesitados de una revisión profunda. Esta revisión es una oportunidad para crear una industria inmensa. A comienzos de diciembre el primer congreso y feria internacional Smart City Expo, celebrado en Barcelona, reunió a emprendedores tecnológicos, gobiernos locales y a nuevos urbanistas y arquitectos para presentar experiencias piloto y proyectos incipientes en todo el mundo.

vía Sueño de la ciudad inteligente.

Entradas anteriores en ArquitecturaS:

Se inauguró en España la primera “calle inteligente”

Inicio – SMARTCITY Expo World Congress (Fira Barcelona, 29 de noviembre al 2 de diciembre)

https://twitter.com/#!/arquitectonico/status/170880209237712897

Ciudades inteligentes – lanacion.com


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Tendencias

Compañías como IBM y Siemens están investigando algoritmos y estadísticas que podrían convertir el caos del tránsito en un fenómeno predecible, ayudándonos a vivir mejor

Armonk, NUEVA YORK (De un enviado especial).- No está leyendo el suplemento equivocado. La ciudad es un sistema. Sí, puede ser mucho más complejo que esa PC sobre la que usted trabaja todos los días, pero no deja de ser un sistema que genera una enorme cantidad de datos que, si son leídos con inteligencia, pueden mejorar la vida de los que vivimos en una ciudad.

Los gobiernos pueden intentar leer esa información y lograr que usted sufra menos embotellamientos u opte, con una sonrisa, por ir a su trabajo en un transporte público. Parece imposible, pero no lo es. Distintos países están haciendo pruebas al respecto.

Un reporte de la ONU sorprendió en 2007: por primera vez en la historia de la humanidad más de la mitad de las personas vivía en ciudades: por primera vez el balance dio saldo negativo para las áreas rurales. En la Argentina, aunque lejos del parque automotor de otros países, en septiembre se logró un record histórico de venta de automóviles.

En este contexto, que vuelve locos a los ecologistas, Buenos Aires es una de las ciudades más pobladas del mundo. Y la tecnología es una de las opciones, de la mano de decisiones políticas concretas, que pueden ayudar a resolver el problema generado porque todos queremos vivir en los mismos (pocos) metros cuadrados.

Luego de que Una verdad incómoda, la película de Al Gore, hizo pensar en un futuro apocalíptico, varios científicos, con el apoyo de grandes empresas o gobiernos, se pusieron a analizar cómo hacer para resolver ya no el futuro, sino el día a día, que hace cada vez más estresante moverse en una ciudad como Buenos Aires, el D.F. mexicano o San Pablo. Además del estrés de sus habitantes, según datos publicados por Siemens, en los últimos tiempos la Unión Europea perdió más de 100 mil millones de euros por año por atascos en el tránsito. El problema es tangible.

Así, otra vez la tecnología levanta la mano para ir más allá de intentos como prohibir el ingreso a la ciudad de los autos con ciertas patentes, promover el uso de bicicletas o el alza en los peajes para coches en los que viaje una sola persona; busca encontrar una salida creativa a un problema creciente.

vía Ciudades inteligentes – lanacion.com.

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