Diseño de vanguardia: Una propuesta que recuerda a Milán | arquitecto Rubén Mochi


Tapizado en jacquard color oro, mantas de lana de la India, sofá "Bhakti" tipo mariposa diseñado por Mochi y producido por Gruppo Industriale Busnelli
Tapizado en jacquard color oro, mantas de lana de la India, sofá "Bhakti" tipo mariposa diseñado por Mochi y producido por Gruppo Industriale Busnelli

El arquitecto Rubén Mochi encontró en Buenos Aires un refugio con reminiscencias de la ciudad italiana donde vivió y trabajó durante 25 años.

A principios de los 80 y recién recibido de arquitecto, Rubén Mochi se instaló en Milán, el sitio indicado para alimentar su vocación de diseñador. Enseguida, sus buenas ideas le abrieron las puertas de la tradicional casa de accesorios Trussardi, para la que realizó una línea de muebles. A la vez, se sumó al Grupo Zeus, uno de los principales movimientos conceptuales de Milán, que entonces proponía el uso de piezas de hierro en color negro en la decoración de interiores, una idea revolucionaria en esos años. Si bien Mochi se especializa en la creación de divanes y lámparas como la ‘Ñandú’, por la que ganó el premio Young Design en Italia, es también reconocido por la realización de tiendas, stands y showrooms para firmas como Dolce & Gabbana, Chanel, Lee o la empresa india de textiles Synergy Home.

desde Diseño de vanguardia: Una propuesta que recuerda a Milán | ESPACIO LIVING.

Polaris World, al borde del concurso de acreedores – Empresas – Economia – ABC.es


Complejo urbanístico en Torre Pacheco
Complejo urbanístico en Torre Pacheco

La inmobiliaria murciana, máximo exponente del turismo de «resorts» residenciales en la costa, ha sido golpeada por la crisis internacional y la caída del turismo.

desde Polaris World, al borde del concurso de acreedores – Economia_Empresas – Economia – ABC.es.

¿Será 2010 el año de recuperación de la vivienda?

Europa | ocholeguas.com | Friburgo, corazón de la Suiza francófona y católica


Vista de la ciudad de Friburgo.  Foto:  Wikipedia
Vista de la ciudad de Friburgo. Foto: Wikipedia

Desde sus orígenes, esta villa medieval fue un bastión del catolicismo y aún tiene a gala contar entre sus hijos a todos los jefes de la Guardia Suiza del Vaticano. Jesuitas, franciscanos, cistercienses… casi no hay orden religiosa que no tenga un pie, un convento o una iglesia allí.

Francisco López-Seivane

Es imposible acercarse a Friburgo, atravesando el viejo puente medieval de madera sobre las aguas del Sarín, sin pensar de inmediato en Cuenca. La amplia hoz del río ha comido la piedra arenisca hasta formar un profundo tajo que la defiende naturalmente. Las casas se levantan arriscadas en lo alto del farallón, como si fueran una continuación de éste, de tal manera que las fachadas, que lucen los mismos tonos grises y verdosos de las piedras del entorno, cuelgan sobre el abismo igual que las de la bella ciudad española.

Desde el río, la ciudad alta parece una fortaleza inexpugnable. Y digo la ciudad alta porque abajo, en la suave ladera que se extiende entre la pared del cañón y la amplia ballesta del río, ha nacido una nueva ciudad que antaño ocupaban los pobres y ahora alberga las casas de los pudientes y los mejores restaurantes. Entre ambas, hay una caída de más de cincuenta metros que sus ingeniosos habitantes han salvado por medio de un funicular que funciona desde hace cien años utilizando las aguas residuales.

El mecanismo no puede ser más práctico y sencillo: el alcantarillado vierte en un depósito que hace de contrapeso y, a medida que éste desciende, va tirando del funicular hacia arriba. Cuando el contrapeso vacía sus aguas en el río, se invierte el proceso y entonces el funicular baja, elevando el depósito vacío hasta el punto de partida.

desde Europa | ocholeguas.com | Friburgo, corazón de la Suiza francófona y católica.

Diseña un sitio como este con WordPress.com
Comenzar