A sus 72 años, el Premio Pritzker Eduardo Souto de Moura se ha enfrentado a un reloj. Acostumbrado a vastas dimensiones, trastear con un artefacto minúsculo ha sido un placer.
Inmenso. Con todas las acepciones que exhala esa palabra. Descomunal, enorme, grandioso… «A mí me gustan estos cambios de escalas. Los gordos somos extrovertidos, aunque tengo días más introvertidos y me gusta dibujar elementos como una manilla de una puerta, o una pluma estilográfica; y en otras jornadas pues un pueblo con 12 o 14 edificios, es que si no, tendría una visión del mundo unilateral, el cambio me hace bien. Me ha gustado mucho la experiencia, tengo una edad en la que solo haces cosas que te gustan, que voy a cumplir 72 años, soy viejo, estoy un poco mal de los pulmones, llevo una vida más tranquila», cuenta Eduardo Souto de Moura.
Nos es grato dar la bienvendia hoy a Darío Álvarez, @arquitectonico, arquitecto desde 1987, es editor del #blogarquitectonico, investigador, profesor universitario, divulgador, consultor… Sin duda un #perfilpublico interesantísimo que debes de visitar mypublicinbox.com/Arquitectonico
Me llegó mediante correo, hace unos días, procedente de Suiza y aprovecho para presentarlo / comentarlo antes que finalice el año.
Mi Ford Fiesta impreso en 3D con el «nick» de mi Blog en Twitter @arquitectonico
Ya estaba participando en el Concurso con mis fotos en los retos semanales, vía Twittery Facebook, cuando encontré este «Perk» en PeerIndexy apliqué de inmediato. Tras varias semanas, agradezco el envío efectuado, que reseño en la siguiente galería de instantáneas:
El clásico logotipo de Ford – inconfundible
El lateral de mi cochecito 3D impreso con mi Twitter @arquitectonico
El techo de mi modelo 3D del Ford Fiesta
Mi nick en Twitter junto al inconfundible logotipo de Ford
La postal de felicitación y comentarios incluida en la cajita del envío
Y el gran final es un nuevo, flamante Ford Fiesta ¿quién será el afortunado ganador?
Así será el edificio que ocupará el solar del antiguo Windsor, tan solo dos centímetros más bajo | Foto: ABC.es
MIGUEL OLIVER | MADRID
El selecto club del «skyline» de la capital está a punto de recibir a un antiguo miembro. Dentro de tres semanas se cumplirán cinco años del incendio que devastó el Windsor. Un lustro después ya no queda casi nada de aquel mítico rascacielos, que allá por finales de los años 70, era el edificio más alto de la capital con sus 106 metros. Por no quedar, no quedará ni el nombre. La nueva propiedad – El Corte Inglés – ha decidido «rebautizarlo» y así desterrar cualquier fantasma -y sombra-del pasado.
De momento, la compañía guarda en secreto la nueva denominación. Lo que no puede ocultar es la velocidad a la que marchan los trabajos de construcción del nuevo edificio. Las obras comenzaron en verano de 2007. Entonces sólo se centraron en consolidar la cimentación. En octubre de 2008 llegó el permiso municipal para ejecutar el nuevo rascacielos. Poco más de un año después, la imagen del inmueble coge forma. El «nuevo» Windsor ya vuela alto.
La nueva torre será sólo dos centímetros más baja que su predecesora: 104 metros. Sin embargo, tendrá 22 plantas, frente a las 28 anteriores. Las siete primeras serán de uso comercial, mientras que el resto se destinará a oficinas. Fuentes de El Corte Inglés destacaron a ABC el «buen ritmo» al que van los trabajos. A estas alturas ya se ha acabado la estructura del nuevo centro comercial, que ocupará la planta baja y las seis primeras alturas.
Por lo que respecta a la zona destinada a oficinas, ya se ha hormigonado hasta la planta 18. Los cálculos apuntan a que pueda acabarse con este proceso en marzo. Además, ya se ha montado la planta técnica en el séptimo y octavo piso. Esta zona está proyectada para albergar las instalaciones de electricidad y agua, entre otras, del edificio. También hace las funciones de «cortafuegos».
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Detalle fachada Museo del Romanticismo. Foto: Web Oficial
Nueve años de esperaHa permanecido cerrado más de nueve años, pero los madrileños no han olvidado el Museo Romántico (perdón, Del Romanticismo, su nuevo nombre oficial). Y es que no son pocos los que se acercan cada día para preguntar cuándo se abre. Bien, pues ese día ha llegado y la espera ha merecido la pena. El precioso edificio del siglo XVIII ha sido transformado de arriba abajo con una reforma valorada en siete millones de euros. Convertido ahora en Museo Nacional, dispone de un 40% de obras inéditas, tres jardines, auditorio, biblioteca…
El 11 de noviembre de 1776, el arquitecto Manuel Rodríguez presentó, en el Ayuntamiento de Madrid, la solicitud de licencia para edificar un palacio en la calle San Mateo, en un terreno propiedad del marqués de Matallana. Diseñado en estilo neoclásico, cuenta con dos fachadas de marcada simetría y escasa decoración, limitándose ésta a las molduras de granito que rodean los vanos. La distribución interior se dispuso en torno a tres patios, permitiendo una abundante iluminación.
A comienzos del siglo XIX, el palacio fue adquirido por los condes de la Puebla Maestre. Es en este momento cuando se introducen algunas renovaciones estéticas, dotando de una mayor ornamentación a la fachada principal, cuyo balcón central incorporó el escudo nobiliario de la familia.
El 21 de junio de 1921, Vega Inclán instaló la Comisaría Regia de Turismo en el palacio. En 1927 el Estado lo adquirió, como sede definitiva del Museo Romántico, que se había inaugurado en 1924.
El Museo ha pasado por diferentes fases de rehabilitación y restauración. En 1944 se acometió una restauración que afectó a la fachada, crujía de la calle Beneficencia, escalera y decoración de las salas, así como el arreglo de los pasillos y del pequeño jardín. Desde este año, la exposición permanente no ha sufrido apenas cambios hasta la actualidad. Posteriormente, en el año 1996, se terminó otra fase de restauración, que afectó especialmente a los espacios bajo cubierta y a la planta baja.
Interior Palacio del Marqués de Matallana, Museo Romántico. Foto: Ministerio de Cultura, España
Estilo: Neoclásico
El Museo Romántico está situado desde sus orígenes en el antiguo palacio del marqués de Matallana, construido por el discípulo de Ventura Rodríguez, Manuel Rodríguez. A principios del siglo XIX fue comprado por el marqués de la Puebla del Maestre y en 1923 pasó a albergar la Comisaría Regia de Turismo, organismo creado por el Marqués de Valle-Inclán, quien en 1921 donó al Estado los fondos de su colección. El edificio fue adquirido por el Estado en 1927.
El edificio fue construido entre 1776 y 1779 dentro de unas líneas clasicistas en las que se mantienen ciertas reminiscencias barrocas, como se pueden comprobar en el uso de molduras en forma de orejas que adornan los balcones. Cuenta con una doble fachada, siendo la de la calle San Mateo la que contiene las estancias principales. La estructura del edificio está organizada en torno a dos patios cuadrados y cuenta además con un interesante jardín romántico.
A pesar de que conserva perfectamente la estructura y organización en planta, el edificio ha sido restaurado en varias ocasiones, estando en la actualidad cerrado por las obras de renovación de su instalación permanente.
Otro más y van…14, en total. El arquitecto valenciano Santiago Calatrava no para de hacer puentes y esta vez ha logrado diferenciarse.
Ahora presentó el proyecto para unir lás márgenes del Rio Bow, en la ciudad de Calgary, Canadá, propuesta destinada a conectar la orilla norte con el centro de la ciudad y permitir una fluida circulación para los habitantes.
Set to open in 2010, the Peace Bridge will span the Bow River in Calgary, Canada. The bridge will primarily serve walking and cycling commuters. Santiago Calatrava brings a sculptural feel to the structure, using the tubular design as a solution to constructional difficulty. The highly technical bridge will have separate lanes for cyclists and walkers, making life a little easier regardless of the type of commute. (via archdaily).
«En sus mejores años «rememora», la cola para sacar entradas en el cine Los Angeles ocupaba toda la manzana: giraba por Callao, daba la vuelta por Sarmiento y se juntaba con la fila que doblaba por Rodríguez Peña para entrar en la función», grafica, al señalar el origen de esa fila desde la esquina de Corrientes y Callao. «Con las nuevas tecnologías, la llegada de los complejos de cine y las crisis, cada vez la afluencia de espectadores fue menor», reflexiona José Luis.
Pese a los cambios y los altibajos que sufrió el lugar, el panorama que el multiespacio ofrece con la actual remodelación (y sus tres salas confortables y modernas) resulta esperanzador: dos salas preparadas para proyectar cine y presentar obras de teatro (una con capacidad para 400 personas y otra para 250) y un multiespacio con 100 sillas transformables para realizar eventos, desfiles, obras de menor producción o convenciones conforman la base del complejo.
La zona arqueológica maya de Uxmal, en el sureste mexicano, estrenó hoy un moderno sistema de iluminación y sonido de última generación que realza la estética de los edificios preservando su estructura y garantizando su conservación
El nuevo estadio mundial de la ciudad de Kaohsiung funciona exclusivamente con la electricidad que generan sus paneles solares.
Podría surtir de energía al 80% de su área.
Puede producir 1.14 GWh de electricidad anualmente y evita la emisión a la atmósfera de 660 toneladas de CO2
Tiene forma y el tamaño de un dragón de proporciones míticas, pero no gasta un solo euro en alimentarse. El nuevo estadio mundial de Taiwanse nutre de electricidad gracias a su techo, 14.155 metros cuadrados de paneles solares.
Este tecnológico estadio, con 3.300 focos, se enciende exclusivamente con energía solar, sin consumir ni un solo vatio externo. Este edificio, diseñado por el arquitecto Toyo Ito, tiene forma de dragón un admirado animal mítico en Taiwan y ha costado 150 millones de dólares.
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